Mediante este anteproyecto de ley, el Gobierno español busca equiparar las obligaciones al respecto de la promoción del cine europeo de las plataformas VOD con las que ya pesan sobre las cadenas de televisión. Eso incluye, principalmente, ofrecer un 30% de obras audiovisuales europeas en el catálogo y aportar parte de sus ingresos a la financiación de dichas obras o al Fondo de Protección de la Cinematografía.
Según han explicado desde Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales, el catálogo de las plataformas de video bajo demanda deberá tener al menos un 30% de obras europeas. De ese 30%, un 50%, es decir, la mitad, deben ser en lenguas españolas. La ley se aplicará a todos los prestadores de servicios de comunicación audiovisual que operen en España como ya se aplica a las televisiones nacionales.
En cuanto a la financiación del cine europeo, las plataformas tendrán que aportar un determinado porcentaje de sus ingresos generados en España. Eso es un tema controvertido, ya que Netflix, por ejemplo, tiene en España dos sociedades, Los Gatos Servicios de Transmisión España y Los Gatos Entretenimiento (ambas fundadas en 2018). Estas publicaron unos ingresos de € 540.000 en 2019, mientras que Netflix ingresó € 5.500 millones en Holanda. De cara a comprobar los ingresos generados en España, las plataformas no solo se tendrán que registrar, sino que la CNMC podrá solicitarles información.
La aportación dependerá de los ingresos generados en España: si es superior a 50 millones de euros la plataforma tendrá que destinar el 5% de ingresos a financiar obra audiovisual europea o al Fondo de Protección de la Cinematografía. De ese 5%, el 70% se tendrá que destinar a obras independientes, y de ese 70% el 40% a obras independientes en cualquiera de las lenguas oficiales de España.
Aquellas plataformas con una facturación inferior a 50 millones tendrán que destinar el 5% a la financiación de obra europea, a la compra de derechos de obra europea o al Fondo de Protección de la Cinematografía. De ese 5%, el 70% se tendrá que destinar a financiar obras de productores independientes. Quedan exentas aquellas plataformas que facturen menos de 10 millones de euros al año.
Este anteproyecto de ley equipara de alguna forma las obligaciones de las plataformas VOD con las de las cadenas de televisión, pero no por completo. Se llevaba tiempo debatiendo si Netflix, HBO y compañía también tendrían que aportar parte de sus ingresos para financiar RTVE, como ya hacen Vodafone y demás operadores. Pero este anteproyecto de ley no toca la ley de financiación de RTVE, por lo que al menos por ahora Netflix y demás plataformas no tendrán que pagar.
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